Iniciado por
josemariasanz
Por tanto, ahora puedo llevar dos posturas en La Carabela: la de siempre, la suya, la postura de controlar la moto en todo momento, especialmente en la ciudad, y la de ir por carretera más relajado. He hecho una prueba de casi 40 km y ha sido estupendo poder ir con las piernas hacia delante y cambiar a la postura original cuando me ha parecido oportuno, y así sucesivamente. Pero hay una cosa cierta: tengo que volver a aprender a tomar las curvas porque cuando voy con los pies en las nuevas estriberas las curvas no se toman igual. No sé si es un tema de aerodinámica, de reparto de pesos o del “deporte” que el motero hace inconscientemente con las piernas cuando toma una curva. Lo cierto es que las curvas, ahora, son diferentes.