Page 6 - On the Road - El Fanzine del KMZ - Número 4
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la leyenda de la
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Uno de los primeros regalos que me hicieron para mi moto, un compãero, fue una S
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pequẽa campana, con la promesa de llevarla en la moto, cerca del suelo. ¿Por qú
habŕa de llevarla y aceptar asi el uso de ese regalo? Se podŕa pensar que es un
mero adorno sin mayor relevancia, pero una de las cosas que tiene este mundo biker
es que todo tiene una raźn, no hay nada que se haga o se use porque ś. Y claro, la
campana no iba a ser menos. Y porque a veces es bonito dejarse convencer y
creer en estas cosas os lo pongo aqú. Esta es la leyenda.
La Leyenda de la campana
Hace muchos ãos, en una noche fŕa de Pues bien, este motorista solitario entŕ a
diciembre, un viejo motorista volv́a de una curva a la luz de la luna y los “Gremlins”
un viaje a Ḿxico, con sus alforjas llenas lo emboscaron, hacíndolo estrellarse
de juguetes y otras baratijas que hab́a contra el asfalto, y en el resbaĺn –antes de
comprado para los nĩos de un grupo de detenerse- una de sus alforjas se rompí.
casas cercanas donde ́l trabajaba. Yaća ah́, incapaz de moverse, cuando los
Mientras montaba a lo largo de esa noche, “GREMLINS DEL CAMINO” se acercaron hacia
pensaba cuan afortunado era ́l en ese ́l. Pero este motorista no estaba dispuesto
estado de su vida, tener un “socio” carĩoso a entregarse y comenź a lanzarles los
como su moto que entend́a su necesidad objetos que llevaba en sus alforjas, mientras
de vagar por las carreteras y que nunca lo los “Gremlins” segúan acerćndose.
hab́a dejado tirado en los muchos ãos en Finalmente, se qued́ sin nada que lanzar,
los que hab́an compartido camino juntos. salvo unas campanas que comenź a hacer
Cercano a los 65 Km, al norte de la frontera, sonar con la esperanza de asustar a los
en el desierto alto, estaban al acecho un pequẽos malvados “Gremlins”.
grupo de pequẽos “critters” conocidos A 1 escaso Km, acampados en el desierto,
como “GREMLINS DEL CAMINO”.
estaban dos motoristas sentados alrededor
Ya sabes, los que dejan obst́culos en de una fogata mientras charlaban de su
la carretera, tales como piedras, palos y d́a de paseo y de la libertad que sent́an
pedazos de viejos neuḿticos, y tambín cuando el viento soplaba en sus caras
clavos de esos temidos por los motoristas, y mientras recorŕan el extenso pás.
tantos otros objetos que inluyen en el rodar En la calma del aire de la noche oyeron
de una moto, aś los “GREMLINS DEL CAMINO” un sonido parecido al de campanas
los aprovechan para tener una ocasín de de iglesia, y dispuestos a investigar
regocijo sobre sus actos malvados.
fueron haća donde proveńa el sonido.
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